
Tipos de vulnerabilidades en aplicaciones web
Dentro de la seguridad informática existe una serie de debilidades que se le puede conocer como vulnerabilidades que pueden llevar, si no se ataca a tiempo, a ataques cibernéticos al obtener un acceso no autorizado dentro de un sistema informático, incluyendo a las aplicaciones web.
Los ciberdelincuentes al saber de este tipo de desventajas se aprovechan de los sistemas informáticos (por ejemplo, de los sistemas operativos) para poder entrar en los mismos y realizar actividades ilegales, como por ejemplo robar información sensible o interrumpir su funcionamiento.
Asimismo, las vulnerabilidades son una de las principales causas por las que una empresa puede sufrir un ataque informático contra sus sistemas. Esto ya que siempre es recomendable actualizar a las últimas versiones, las aplicaciones informáticas, sistemas de protección y sistemas operativos, pues esas actualizaciones contienen muchas correcciones sobre vulnerabilidades descubiertas.
Esto nos lleva a las amenazas informáticas, que no son más que los ataques externos que puede sufrir el mismo. Conociendo estos términos podemos entrar en materia: existe una serie de vulnerabilidades que pueden desarrollarse dentro de las aplicaciones web.
Sabemos que las aplicaciones en el área web son herramientas útiles utilizadas por las organizaciones alrededor del mundo para un determinado fin. Estas ofrecen diversos beneficios para las empresas, que van desde la agilización de procesos, la optimización de las comunicaciones y la digitalización de servicios, entrando en el mundo 2.0 de actualizaciones.
El reporte de Acunetix “Web Application Vulnerability 2019” señaló que las debilidades de aplicaciones web son la amenaza más crítica en las empresas y que, por ende, estas tienen que ser captadas y atacadas en un tiempo determinado. Por su parte, se precisaban para ese momento que nuevos enfoques para la mitigación de vulnerabilidades en la capa de red.
Es importante entender que el buen uso de las aplicaciones web va a depender del correcto funcionamiento de estas herramientas, esto quiere decir que si no se tiene un correcto uso pueden llegar a fallar y no ser tan efectivas como se esperan.
Vulnerabilidades para las aplicaciones web
Las más comunes dentro de este sistema de vulnerabilidades para las aplicaciones web, según un documento publicado por el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE), son:
– Pérdida del control de acceso
El control de acceso está relacionado con una política de permisos para los usuarios de una aplicación web. La vulnerabilidad Broken Access Control hace que desaparezcan estas restricciones, permitiendo al ciberdelincuente actuar sobre el sistema y tener acceso a información confidencial.
– Fallos criptográficos
Hay ciertos datos de las empresas, como las credencias de acceso o la información bancaria, que deben estar cifrados para evitar su exposición a personas ajenas a la organización.
– Inyección
Esto ocurre cuando un ciberdelincuente puede enviar datos dañinos a un intérprete. Para evitarlos, hay que tener API seguras y controles de verificación en el momento de introducir los datos.
– Diseño inseguro
Al desarrollar una aplicación web es primordial incluir sus características de seguridad desde la fase del diseño. Si no es así, se exponen a que modifiquen sus datos o accedan a sus servidores.
– Configuración de seguridad defectuosa
En un entorno de aplicación web los intentos de acceso pueden buscar su entrada mediante cuentas por defecto, versiones obsoletas con vulnerabilidades sin actualizar, directorios desprotegidos, etc. Por ello, tiene que estar todo bien configurado.
– Componentes vulnerables y obsoletos
Un delincuente cibernético puede comprometer un sistema mediante vulnerabilidades ya conocidas en componentes comunes, como la versión del sistema operativo o aplicaciones instaladas en el servidor, entre otras. Las mayores brechas de seguridad se han producido mediante la explotación de este tipo de vulnerabilidades.
– Fallos de identificación y autenticación
Normalmente, este tipo de problemas sucede cuando en las interfaces de acceso no se controla el número de intentos de autenticación, hay una baja complejidad de las contraseñas o no se implanta un sistema multifactor.
– Fallos en el software y en la integridad de los datos
Muchas aplicaciones se actualizan de manera automática. Cuando no son verificados, los ciberdelincuentes podrían modificarlas cargando sus propias actualizaciones e incluyendo código no deseado.
Otras vulnerabilidades
A pesar de que la tecnología es una máquina que no descansa sino que evoluciona constantemente, las vulnerabilidades no son la excepción, puesto a que a pesar de que se conocen los posibles casos básicos, también hay que tomar en cuenta los nuevos que han surgido. A continuación te presentamos los siguientes:
1. Cross Site Scripting (XSS)
También conocido como Cross Site Scripting (CSS), es una vulnerabilidad que se encuentra recientemente y que es bastante empleada, ya que está en la mayoría de las aplicaciones web. Esto le permite al hacker insertar un código malicioso dentro de las páginas que visitan los internautas para así evitar el acceso al site o poner en práctica el phishing. En la actualidad existen diversos tipos de ataques XSS, pero hay tres que son los principales:
- Basado en DOM XSS No XSS persistente XSSDOM XSS.
- No persistente XSS.
- Persistente XSS.
2. Falsificación de solicitudes entre sitios / CSRF
Aunque no lo crean, este tipo de ataque es uno de los más comunes y los ciberdelincuentes se aprovechan totalmente. Esto también se conoce como «sesión montada» o «ataque con un solo clic» y se abrevia con las siglas CSRF o XSRF.
El modus operanti de esta vulnerabilidad permite que se transmita a través de comandos no autorizados. La falsificación de solicitudes se diferencia de los scripts entre sitios (XSS), pues en vez de valerse de la confianza que tienen los usuarios en un sitio determinado, la CSRF se vale de la confianza que tiene la persona en su navegador de preferencia.
3. Ataque de inyección SQL
En este tipo de ataques emplea la inyección de códigos para explotar la vulnerabilidad de un determinado sitio web. Se utiliza comúnmente para atacar aplicaciones que son controladas únicamente por datos, donde se colocan sentencias de SQL en un campo de entrada para su ejecución.
Asimismo, este tipo de ataques busca vulnerar la seguridad del software de la aplicación y permite al atacante poder falsificar identidades, manipular datos existentes, cambiar saldos y transacciones, destruir datos, convertirse en administradores de base de datos y hasta divulgar completamente los datos del sistema.
4. Vulnerabilidad de redirección de URL
La vulnerabilidad según la redirección de URL consiste en que una aplicación toma un parámetro específico y redirecciona a los usuarios a sitios sin ninguna validación. Durante el proceso se utiliza ampliamente en los ataques conocidos como phishing, donde los usuarios son engañados y caen dentro de un sitio web malicioso.
4. Clickjacking
Se aplica más que todo en páginas como Facebook y Twitter, lo que permite realizar acciones de redirección en la web de la víctima. Al utilizar el clickjacking el hacker utiliza diferentes capas transparentes o en marca de agua para poder engañar al usuario para que cliquee en un determinado botón o enlace en otro site, cuando pretendía hacer clic en la página de nivel superior.
Para cerrar esto, podemos decir que la vulnerabilidad no solo está en sistemas grandes sino también en aplicaciones que pueden estar dentro de un dispositivo móvil, tabla o PC. Para prevenir este tipo de inconvenientes es importante que las empresas contraten a compañías especializadas en la prevención de este tipo de inconvenientes, como es el caso de MásQueSeguridad, generando así una plataforma más segura y confiable.