Hace unos días, durante un encuentro virtual para enfrentar el ransomware, entre el 13 y 14 de octubre, 31 países de laUnión Europea y otras regiones del mundo se comprometieron a trabajar en conjunto para frenar el auge de este flagelo informático.
Precisamente, esta lucha fue una iniciativa del Gobierno de los Estados Unidos, como una reacción a la escalada que experimentó el ransomware desde 2020 y los efectos que ha representado para las empresas y la seguridad de los organismos.
Según se pudo conocer, en esta reunión participaron representantes de Alemania, Australia, Brasil, Bulgaria, Canadá, Corea del Sur, Emiratos Árabes Unidos, Estados Unidos, Estonia, Francia, India, Irlanda, Israel, Italia, Japón, Kenia, Lituania, México, Nigeria, Nueva Zelanda, Polonia, Rumania, Singapur, Sudáfrica, Suecia, Suiza, Ucrania, Reino Unido, República Checa, República Dominicana y de Países Bajos; quienes señalaron en una declaración tras el encuentro:
«Habiéndonos reunido virtualmente los días 13 y 14 de octubre para debatir la creciente amenaza para la seguridad mundial que supone el ransomware, los ministros y representantes de los 31 países participantes y la Unión Europea]reconocemos que el ransomware es una amenaza creciente para la seguridad mundial con graves consecuencias económicas y de seguridad.»